
Respira
Cantos perdidos Fuegos prenden ciegos hilos
Hasta la sepultura
Se cierran puertas sin forma
En claves anónimas
Una oculta llave conoce el presagio de letras prohibidas
En el sin sentido de fragmentos dibujados por frenéticas tintas
Que por apatías perdían su cordura y color.
Era la muerte misma… Prevención racional. Adiós surreal.