jueves, 11 de marzo de 2010

Quebranto del silencio


Ahora se llega la hora. Las palabras no esperarán ni una sola Era más, saldrán afanadas para ser el verbo de la vida y del poder. Los oídos se aprestan. Las gentes esperan. Los niños sueltan las cadenas. La mentira se esconde para perderse para siempre. Arquitectos transparentes construyen la casa del árbol. El cielo llega y derrama su luz. La visión triunfa. Las mariposas danzan en lo eterno y sus destellos encarnan resplandecientes estrellas celestes.


(Para Dios que me dio una nueva vida)